martes, 5 de octubre de 2010
Para ti, amor.
Vámonos a recorrer el mundo, que no haya un sólo semáforo en rojo en nuestras carreteras, miraremos a través del cristal todas las nubes, y lloverán estrellas cada noche. Vamos a caminar por las vías del tren, a hacer equilibrios con los pies y con la mirada, ya no me caigo, lo prometo. Vamos a hacer mil brindis más, por la vida, por todos los segundos robados al reloj, por las tardes de verano y de ilusiones. Por las noches de abrazos eternos y por todos los caminos que quedan por trazar en el mapa. Me permito sólo por esta vez olvidar el resto de historias que he cosido a mi piel, que todos los lienzos se queden en blanco para llenarlos de besos y palabras escondidas. Voy a poner todo lo que pueda y más, aún a riesgo de saber que no siempre las locuras escogen un buen lugar donde quedarse. Aún sabiendo que tengo habilidades para escabullirme siempre que empiezo a temblar más de la cuenta. Porque al fin y al cabo, de qué sirve todo esto si no puedes arriesgarte a sentir con cada poro de tu piel, si no decides respirar la vida hasta el último insignificante segundo. .
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3 comentarios:
Más pierde el cobarde que no se atreve, que el valiente que se arriesga :)
hola!! me encanto la entrada! tu blog nunca me decepciona!
besitos :D
Ayyyy que tierno (L) UN BESO!
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