diez mil veces infinito.

¿Te diste cuenta? Ya ni significados maestros, ciencias perfectas y universos enteros podrían siquiera tratar de describir a letra exacta y perfeccionista, este sentimiento que está impregnado en las partículas que componen a mi piel, y a las células que están dentro de mi sangre. Cada día, algo más. Tu forma de brillar, la intensidad de tu irreversible amor, y tu abrumadora fealdad a lo que eres, a lo que llevas dentro, te hace ser lo que eres hoy, y no por que finjas serlo, si no, porque naciste así. Fuerte como la esencia del cielo, y fugaz como el brillo del sol. Fenomenal como las estrellas, y la octava maravilla de mis maravillas. Delicado y valiente, valioso como los diamantes. Pero lo más importante, imperfecto y orgulloso de todo lo que te hace persona, todo lo que te hace “Ser”. ¿De donde vienes? ¿Nunca te lo preguntaste? Tal vez no seas existente, pero mientras pueda saber de ti, vas a ser el cuento más fantástico e irreal en mi diario de vida. Como un cuento de hadas… uno perfecto y diferente a los demás.